La niña de rojo
Todos conocen la historia. Nadie es ajeno. Crecimos con ella. Nos educaron con este relato. Buscábamos moralejas y enseñanzas para la vida detrás de cada oración. Fuimos plenos conscientes de los infortunios de la Caperucita Roja y de las argucias del malvado Lobo. Ay, pobre niña, pensábamos. Nos enseñaban a pensar así. Elegían las ideas …