El carnicero poeta

butcher, flesh, steak-4753359.jpg

La siguiente es una pequeña nota periodística encontrada de casualidad en el diario “La Crónica del Oeste de Chivilcoy”.

Roberto Urdaiz fue un carnicero de la ciudad de Chivilcoy al que siempre le gustó leer en secreto los clásicos de la literatura. Según se ha averiguado por los forenses que lo encontraron colgado de una soga en el freezer de su local, tenía en su casa más de noventa relatos cortos, tres novelas (una sin concluir) y más de quinientos poemas de estilo libre que había escrito durante sus cincuenta y cuatro años de vida.

Al preguntarles a los familiares por esta doble personalidad, ninguno estaba enterado. Aunque algunas vecinas mayores de edad, que nos pidieron expresamente que no diéramos sus nombres, se animaron a decir que;

El Roberto siempre nos decía piropos y cosas lindas cuando le comprábamos bola de lomo o carnaza”.

Lamentablemente la familia decidió no publicar nunca estos escritos por motivos personales. Pero según supimos de buena fuente, todos estos ejemplares literarios del Carnicero Poeta, si se me permite el título, fueron quemados por su hermano, Jorge, en un arrebato de envidia al enterarse que Roberto era, además de carnicero, escritor y muy bueno, y él, un simple panadero sin ningún talento literario.

Solo se pudo recuperar, gracias al accionar de los investigadores y del juez a cargo de la causa, el último poema que dejó a sus familiares como nota de suicidio.

A continuación, transcribiré esta forma ocurrente de decirles a sus seres queridos que no quería pertenecer más a este mundo, que de alguna forma se había cansado de seguir vivo.

 

Ya no hago nada con mi vida.

Con mi vida ya no hago nada.

Sólo me siento solo a ver la lluvia caer por la ventana.

Nada más me interesa.

Mis últimas gotas…

 

Ya no me emociono con las cosas bellas de este mundo,

ni me consterno con las situaciones inoportunas

del vivir.

El silencio es y será para siempre mi compañero,

mi guía.

Mis últimas palabras…

 

El tiempo ya no me seduce.

Es el final que tanto anhelé.

La eternidad me espera.

Es mi último final.

 

Roberto Urdaiz

Hay quienes se atreven a decir que este magnífico poema contiene un mensaje subliminal para sus conocidos. Otros, entre los que se incluye éste humilde periodista de “La Crónica del Oeste”, preferimos disfrutar de las últimas palabras que Roberto Urdaiz, carnicero y poeta de la localidad de Chivilcoy, en la provincia de Buenos Aires, Argentina, dejó a este triste mundo para la posteridad.

Este cuento pertenece al libro El momento RANDOM, publicado en el año 2021.

Mis otros libros

La soledad del alma

Pila Gonzalez

Creador de contenidos
Me gusta lo simple. Juntarme a comer y tener una buena charla con mis amigos, salir a correr, sentarme a leer en un parque, escribir en cuadernos, recorrer lugares caminando. Enamorado de los Balcanes, me autodenomino un catador de cafeterías por el mundo.
Más sobre mí

Otros textos que te pueden interesar

station, tracks, train station-839208.jpg

El próximo andén

Esa palabra justa, una mirada en silencio, un te quiero robado, un beso sin porvenir.   Antes de la madrugada te espero pensando, leyendo esos surcos, tus marcas en la piel.   Soy un poeta maldito de glorias pasadas que surge de las cenizas de la imaginación.   Saldando deudas...

Leer más

El japonés más bostero del mundo

En Japón lo extraño es uno, por más extraño que parezca. Los trenes viajan repletos de gente que lo hace en silencio y estresada. Sólo posan la vista en libros o en las pantallas de celulares estrambóticos. Los adultos miran dibujitos animados que lo llaman Animé o leen historietas que...

Leer más
school work, write, still life-851328.jpg

Carta desolada

Mar del Plata, jueves 19 de septiembre de 2013 Estimado Dr. Garmendia: ¿Cómo le va? Espero que bien, porque digamos que, a mí, no. Creo que he tenido una recaída y me urge hablar con usted. Le escribo esta carta porque no me puedo comunicar por teléfono (o quizás no...

Leer más
notebook, hand, pen-2178656.jpg

Diario de un niño

Unos de los últimos recuerdos que tengo de los cinco juntos, fue cuando estábamos yendo para Olavarría. Era de noche y creo que llovía. Faltaban quince kilómetros, según le oí decir a mi padre en un pensamiento en voz alta que tuvo. Íbamos al velorio del tío Pepe Muñoz. Yo...

Leer más

Perdidos en los campos

¡No me hables, Tronco! Tengo una calentura que vuelo, mirá. Pero esto es culpa mía. Yo sabía en lo que me metía. Pero, no. Igual fui. Cabeza dura que soy. Estoy que no doy más, che. Al final, me fui unos días a los campos a descansar y lo que...

Leer más
parking space, man, city-1487891.jpg

Récord

La tarde se escondía tras los morros para darle paso a la noche. Yo intentaba dominar mi preocupación con respiraciones largas y profundas. El tiempo se me terminaba. Mi récord corría peligro. La sangre continuaba derramándose como nunca. Yo seguía sin poder retirar el cuchillo del abdomen de mi cuarta...

Leer más
lamp post, pathway, fog-768567.jpg

Sin caprichos exagerados

Sentirla cerca a pesar de las distancias geográficas que nos separan es el mayor alivio que experimento.   Y eso que en estas épocas de olvidos precoces nadie sale ileso.   A pesar de todo, seguimos en contacto. Hablando casi todos los días. Un “buenas tardes”, un “¿cómo estás?” son...

Leer más
hospital, room, inside-2301041.jpg

Manicomio

En la tranquilidad de su oficina la enfermera tomó el teléfono celular de su bolsillo y marcó un número que se sabía de memoria. —Hola… Si… ¿Qué tal?… Sí, es nuevo acá… veinte años aproximadamente, es sano… Sí, es espático… Nos encontramos el sábado en el mismo lugar de siempre....

Leer más
butcher, flesh, steak-4753359.jpg

El carnicero poeta

La siguiente es una pequeña nota periodística encontrada de casualidad en el diario “La Crónica del Oeste de Chivilcoy”. Roberto Urdaiz fue un carnicero de la ciudad de Chivilcoy al que siempre le gustó leer en secreto los clásicos de la literatura. Según se ha averiguado por los forenses que...

Leer más
writer, typewriter, author-1421099.jpg

¿Y si esto es un Manual de Estilos?

(ponele los signos de puntuación que quieras y dónde quieras, yo no tengo ganas) Y bueno. Y a veces me cansan las reglas ortográficas y me da por escribir libre, como se me canta. Y si lo importante, al final, es que tenemos que llegar a los lectores. Y mucho antes...

Leer más
man, face, portrait-1845814.jpg

Después de tanto, comprendió

Después de tanto escapar se sintió cansada y descubrió que el problema de su cansancio se debía a escapar tanto.   Después de tanto sufrir se sintió angustiada y descubrió que el problema de su angustia se debía a sufrir tanto.   Después de tanto amar se sintió perdida y...

Leer más
landscape, moon, night-1629977.jpg

20 Poemas cortitos que adornaron Ciclotimia

I Imaginaron que vivían en un mundo ideal y se olvidaron que existían planetas limítrofes II Tanto se ha escrito sobre la Luna que los verbos se aburrieron de tanta conjugación inútil y de familiarizarlos con infinitos y torpes adjetivos. III Quiso perderse en el infinito de su mirada y...

Leer más

¿Conectamos?

pilag6@gmail.com

Berlín, Alemania

    Dejá un comentario

    Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *