Como te iba contando el otro día, Tronco. ¿Te acordás del asunto del Chuzo y la basura de la vieja de la casa gris clarito de allá? Bueno, me lo crucé al Chuzo en el baldío y lo encaré de una. El muy vago me juró y me recontra juró, hasta cruzó las patitas así, mirá, de que él no tenía nada que ver con el Chuzito. Hasta me dijo que no era hijo de él. Que todo el mundo anda diciendo eso pero que la Matilde está con cualquiera y él hace rato que no la visita. Dice que ahora tiene una perrita de raza que vive enfrente de la canchita y que, desde que está con su nueva novia, no tiene ojos para nadie más. Yo mucho no le creí, Tronco, pero a decir verdad, seamos sinceros, el Chuzito ni se le parece. Tiene las patas grandes como el Pirata y el cuerpo abananado del Felipe, el salchichas que vive en los departamentos. Es un engendro pobre Chuzito.
Bueno, si queremos hurgar fino, Tronco, y ya que nos estamos hablando a calzón quitado, yo un par de veces le hice la visita a la Matilde. ¿Qué querés hermano? No me mirés así. Viste como es la cosa. Vos porque tenés a la Panchita. A veces el cuerpo demanda, viejo y la Matilde es tan gauchita. Te digo más, el Chuzito hasta podría tener una parte de mi ADN.
Todo esto lo pensaba mientras hablaba con el Chuzo. Y mientras más le daba vueltas a la cosa, la rabia que tenía se me iba pasando. Si hasta sentí compasión por el pobre Chuzito. Igual me le puse firme al Chuzo. Lo paré en seco. Le advertí que no se volviera a reír de mí porque le arrancaba una oreja a mordiscones limpios. Le fui por ahí, ¿porque viste cómo se las cuida el muy gato? El siempre anda diciendo que es cruza de Terrier con perro orejudo. Pero andá a creerle al Chuzo. Para mentir y llevarse la parte es mandado a hacer.
Por lo menos yo dejé las cosas en claro.
—Son cosas que pasan, Manchitas —me decía.
“Cosas que pasan”. Yo le voy a dar a ese.
Pero me quedé pensando lo del Chuzito. ¿No seré yo el padre, Tronco? Ese pobre cachorrito correteando por las calles sin una figura paterna que lo guíe.
En fin. Ahora lo que me preocupa es la Lolita. Hace rato que no la veo. El Gordo no la está llevando más a pasear a la plaza y yo me quedo esperando como Penélope atrás de los árboles todas las noches. También se me pasó la rabieta con ella, que te voy a decir, Tronco. ¿Cómo es eso que dicen, un pendejo tira más que una yunta de bueyes? Y tienen razón, el amor puede más. ¡Uy, como estoy hoy! Re poeta. Me parezco al Pablo Perruda ese.
Pero vos quédate tranquilo, Tronco. Dormí sin frazada que un día de estos vas a escuchar el ladrido de unos pequeños Caniches-Toy con manchitas por el barrio. La tengo entre ojo y ojo a la guacha.
Bueno, Tronco. Me voy. Me pica la barriga y no son pulgas. ¡Paaaa! Como sigo de filósofo. Mandále saludos a la Panchita y decile que no se haga la gata y que un día de estos se acerque a saludar al alambrado.
Pila Gonzalez
Creador de contenidosOtros textos que te pueden interesar
El julepe de andar solo
Bueno, Tronco. Como te iba contando ayer antes de que me cagara. Cuando los grillos del bosque me sacaron carpiendo anduve deambulando sin saber para donde disparar entre los bosques. No te imaginas el julepe que tenía. Estaba todo oscuro, había muchos sonidos extraños, sombras que se me aparecían mientras...
Leer másLa cagada que me costó una coima
¿Alguna vez les pasó que tuvieron que pagar una coima por una cagada, literal? Bueno, a mí sí. Eran las cinco de la mañana y estaba sentado en una combi viajando desde Malasia hasta Tailandia. No sé si fueron los nervios de pisar un nuevo país, la Coca Cola con...
Leer másManicomio
En la tranquilidad de su oficina la enfermera tomó el teléfono celular de su bolsillo y marcó un número que se sabía de memoria. —Hola… Si… ¿Qué tal?… Sí, es nuevo acá… veinte años aproximadamente, es sano… Sí, es espático… Nos encontramos el sábado en el mismo lugar de siempre....
Leer másVeo lo que veo y puedo
Veo un sol desangrado y simbólico. A lo lejos, Muy lejos. Detrás de los edificios. Rojo furia. Naranja frutal. Amarillo cansado. Veo una montaña imponente y borracha. A lo lejos, Muy lejos. Detrás de los bosques. Verde tregua. Marrón brumoso. Negro pálido. Veo una ciudad olvidada y rebelde....
Leer másNo tomo más en la puta vida
¡Ay! La puta madre. No tomo nunca más en mi vida. No doy más. Ya estoy grande para estas cosas. Cuando era adolescente, vaya y pase, pero ahora. Soy un padre de familia y mis nenas, mis dos soles, no se pueden levantar y ver a su “Papito hermoso” con...
Leer másLas sábanas
Haberme errado ese penal, en el último minuto de la final de la Copa, me trajo muchos problemas con la barra brava del club. Es que los muchachos no se lo tomaron a bien y se pusieron violentos. Igual lo que rescato de todo esto fue lo que vino después....
Leer másEl amor a veces duele
¿Sabés, Tronco? Estuve con el Perico y me invitó a que me vaya un fin de semana de estos a los campos con él. Me habló de acampar cerca de la laguna, de pescar, de corretear libres por el bosque, de hacernos un tratamiento de barro para el pelaje y...
Leer másEl payaso Almodóvar
Estaba viejo y sus chistes ya no causaban el efecto de antes. Por eso el administrador le había comunicado que esta sería su última gira con el circo. Lo iban a remplazar por un dúo de payasos más jóvenes que él, y que, aceptando la realidad, su tiempo había pasado....
Leer másHoy celebro
Hoy celebro el nuevo día, los ratos inseguros en la tierra, los cambios del camino, los tiempos ganados con amigos. Celebro el amanecer de una nueva lucha, las calles desoladas, los sueños compartidos, las risas sin contemplaciones. Hoy celebro los nuevos comienzos, la vida sin prejuicios, la naturaleza...
Leer másSe pudrió todo
¡Se pudre todo, Tronco! Se pudre todo y me importa una mierda la Coquita, el Pirata, el juicio y la puta que lo re mil parió. No, viejo. Así no. Ahora sí que me van a conocer. Quién es el Manchitas enojado. Hasta acá me la banqué como un campeón,...
Leer más¿Y si esto es un Manual de Estilos?
(ponele los signos de puntuación que quieras y dónde quieras, yo no tengo ganas) Y bueno. Y a veces me cansan las reglas ortográficas y me da por escribir libre, como se me canta. Y si lo importante, al final, es que tenemos que llegar a los lectores. Y mucho antes...
Leer más